Varapalo enorme para el juvenil B
– Una buena racha del juvenil B acaba en un partido trampa en Aitxarte contra La Merced que acabaría en un 0-2 dejando claro que ante la relajación, el juvenil es un equipo vulnerable.
Partido trampa en Aitxarte. Ellos llevaban 4 partidos sin perder a pesar de ser un media tabla y el juvenil venía de una buena racha. Pero con números no vale ganar. El juvenil salió al campo con una defensa que jugó peor de lo habitual, mas fallón compuesto por Saborit, Ujfalusi, Luis Amaranto Perea e Iraola (Mikel López, Ruiz, Kelly, Ordorika respectivamente) y sus ataques no cuajaban. Ellos salían mas enchufados desde el principio con mas hambre tal vez de ganar y se reflejó en el campo. No fue el día de algunos en el aspecto de mantener el balón, muchas pérdidas tontas de nuestra 3º línea y 2º compuesto por Schuster, La Escobita, Kagawa, Caño Ibagaza y Kun Agüero ( Gomez, Darpon, Arenaza, Hormaetxe y Orbito). Tampoco conectaban las diagonales desde atrás a Peter Crouch (Goldaracena) y para colmo, un tiro lejano hundiría aún más este panorama en la que tuvo mala fortuna el portero Josu.
El B parecía espabilar tras un comienzo flojo pero seguían algo peor de lo habitual atrás y nada funcionaba arriba pero la condena del B fueron los huecos que creaba el equipo al estar tan partido. Además La Merced, que como he dicho, salió enchufado, hacía daño con su velocidad arriba y su relativa seriedad defensiva además de los propios errores del Loyola. Pudo caer el 2º antes del descanso pero no fue así. Por parte del Loyola, solo hubo un tiro lejano de Arenaza, unas faltas de Schuster y algún córner sin peligro.
Al descanso iba el equipo con ganas de revertir la situación pero no fue así desgraciadamente. El equipo seguía partido, sin suerte arriba ante la creación de ocasiones desde diagonales de atrás y combinaciones arriba hasta una falta bien tirada de Schuster. Pero ellos llegaban con mas peligro, el portero Josu salvó un par de ellas con solvencia mientras la defensa sufría para deshacerse de ellos. Además el equipo seguía perdiendo balones tontamente pero ocasiones llegaban como por ejemplo de Pape Diop (Rodri) en un buen remate (para mí el mejor del partido) y otra falta de Schuster que iba por la escuadra pero el portero (en mi opinión con suerte) sacó providencialmente. Y Peter Crouch también tendría alguna que no acabaron en gol. Pero la batuta del partido la llevaban ellos, y así creaban mas ocasiones.
El segundo llegaría en un despiste defensivo (y una ejecución muy buena) cuando el equipo estaba demasiado abierto, y un pase interior con el delantero cazándolo muy inteligentemente. Ahí se venía abajo el equipo, la desesperación e impotencia se hacía notar a varios jugadores que se transformaría en calentones y faltas. Sin embargo, en el tramo final del partido el juvenil dispuso de muchas ocasiones que no supo materializar. Desde luego, no era el día de ninguno de este equipo se podría decir.
Toca afrontar la realidad tras la euforia de la buena racha y espabilar para afrontar un dificilísimo choque la semana que viene en Ugao para demostrar que el equipo estará arriba.